Saltar al contenido
Reflexiones

Ejercicio en Pareja (¿Qué es lo que te gusta de mi?)

Hola amigos y amigas, que tal, como va.

Hoy vengo a proponerles un ejercicio, un ejercicio que se hace en pareja.

Como veremos después, quizás no haga falta estar en pareja para hacer el ejercicio.

Pero voy a hacer la propuesta para que lo intenten hacer en pareja, si están en pareja.

Esto es mucho más que un juego, es un ejercicio.

En otro contexto, sería parte de un ejercicio terapéutico, aquí no lo es.

Pero si es un ejercicio en la búsqueda de un conocimiento mejor de la relación que tenemos con otro, de cuánto nos conocemos, de cómo nos conocemos, de actualización de nuestra imagen, y de tantas otras cosas.

Lo ideal sería, que, si vas a hacer este ejercicio en pareja, lean este artículo en pareja para que cada uno reciba esta información al mismo tiempo que el otro.

Si esto no puede ser posible, bueno, lo leerás tú y decidirá si quieres hacer el ejercicio; y si lo quieres hacer, le pedirás a ella o a él, que lo lea después para que haga su parte.

De hecho, es un ejercicio que se hace en dos partes, una tuya y otra de la otra persona que te acompaña.

Empecemos por tu parte.

Para tu parte hace falta que tengas dos hojas de papel, y hace falta que tengas por lo menos, por lo menos, 10 minutos para dedicarle a este ejercicio antes de seguir adelante con él.

En estos 10 minutos, lo que yo te voy a pedir que hagas, es que en la primera hoja vas anotar o escribir las cinco cosas que más te gustan de tu pareja.

Las cinco cosas de él o de ella que verdaderamente te atraen, que te atraen hoy en este tiempo presente, la pregunta sería: ¿Qué es lo que más te gusta de tu pareja?, ¿Qué es lo que más valoras de él, o de ella?, ¿Qué es lo que realmente te fascina de esa persona con la cual compartes gran parte de tu vida?

Cinco cosas, por lo menos cinco cosas y las anotas en una lista.

Esto tiene que ser dicho en secreto, no en presencia de tu pareja.

Ya habrá tiempo para compartirlo, pero por ahora, tómate un espacio libre, un espacio solitario, un espacio donde nadie te moleste durante 10 minutos para que hagas esta lista.

Cuando termines de hacer esa lista de las cinco cosas, por supuesto, puedes tachar, puedes corregir, puedes abandonar esa lista y hacer otra hasta que estés conforme con la lista que hiciste de las cinco cosas que más te atraen de tu pareja.

Luego, dobla esa hoja, y ponla dentro de un libro cualquiera que tengas al lado y no te olvides dónde está.

En la segunda hoja, voy a pedirte que hagas un acto de adivinación, si tú quieres.

Quiero que anotes en esa segunda hoja, cuáles son las cosas que van a aparecer en la lista de él o de ella.

Qué va a poner tu pareja en su lista si le preguntamos cuáles son las cinco cosas que más le gustan o que más valoran de ti, ¿Qué va poner ella o él en esa lista de ti?

Tómate tu tiempo en solitario, sin contarle a la otra persona qué estás haciendo, o por lo menos, sin que esté a la vista de tu pareja.

Doblaras esa hoja y la guardarás con la otra, adentro del libro.

Si todavía no lo hiciste, le compartirás a tu pareja el ejercicio que estás haciendo.

Pídele a ella o a él que siga estos mismos pasos, o que lea este artículo, para que de alguna manera ella también haga las dos listas: Una que diga qué es lo que a ella más le gusta o más valora de ti y otra donde ella o él diga qué es lo que cree que dice tu lista de lo que más te gusta o valoras de ella.

Así, cada uno de ustedes tendrá dos listas, dos listas para animarse a hacer el ejercicio.

Cuando el ejercicio se ha hecho, este artículo ya no estará puesto aquí, pero de todas maneras puedo contarles en qué consiste

Tómense un tiempo, si es posible un tiempo tranquilo, si es posible después de una linda cena.

Luego, sentados juntos, cada uno de los dos traiga a la mesa sus dos listas.

Y ahora, léanle al otro qué es lo que me gusta de ella, qué es lo que valoro de ella.

Díganlo con ternura, no digan: “hacendosa”, “linda”, “ordenada”, “tranquila”, no, no, no, no.

Miren a esa otra persona a los ojos y díganle de verdad y con sentimiento, “me gusta como me miras”, “me gustan tus ojos”, “me gusta tu inteligencia” o lo que fuera que ustedes hayan anotado en esa lista.

La otra estará guardada por ahora, la otra lista que ustedes hicieron.

Luego, ella o él, le dirá ustedes su lista; les leerá a ustedes su lista, lo que le gusta, lo que valoro de ti es, y les leerá las cinco cosas.

Este será el momento final, el momento de desvelar lo que cada uno había predicho, respecto de lo que el otro nos va a decir.

Comparen esas listas, dense cuenta en este ejercicio, de cuáles son las cosas que ustedes creen que el otro valora de ustedes.

Sorpréndanse de confirmar que es así, y sobre todo, fascínense de estas cosas que no aparecen en la lista del otro y que ustedes creyeron que eran valiosas para él o para ella.

Alégrense de aquellas cosas que ustedes no sabían que el otro valoraba de ustedes, y que ahora aparecen allí muy valoradas por la otra persona.

Quizás, si el ejercicio les gusta, pueden hacer una de dos cosas con este ejercicio: pueden prolongar el ejercicio, volver a hacerlo dentro tres días, cuatro días, cinco días y comprometerse a encontrar cinco cosas más que no estén en esta lista que hicieron originalmente; ya no harán falta dos listas.

Una lista más de cinco cosas que me gustan o valoro de ti, motivados y disparados, quizás, por este ejercicio.

Ojalá lo puedan disfrutar, ojalá aprendan mucho, y ojalá puedan terminar esto dándose un abrazo, un abrazo que concluya en que lo que valoran del otro es que esté al lado de ustedes.

Vuelvo a aclarar que este ejercicio no es restrictivo para una pareja.

Este es un ejercicio maravilloso para hacer entre dos amigos, para hacer entre dos hermanos, un ejercicio fantástico para hacer entre un padre y un hijo o hacer entre una madre y un hijo.

Y explórenlo, exploren este ejercicio, sobre todo anímense a poner por escrito qué es lo que me gusta de ti,

Este es el objetivo del ejercicio: Quiero darme a conocer, Quiero conocerte, y sombre todo, quiero que desde el “conocernos” nos animemos a aceptarnos más o lo que es lo mismo, a amarnos mejor.

Si has podido realizar este ejercicio con tu pareja, cuéntanos tu experiencia.

Descubre más reflexiones de pareja.